¿Cómo elegir el lubricante adecuado para mí?

El pasado domingo sacamos del tuppersex el primer objeto: las bolas chinas. Esta semana... hablamos de lubricantes!

¿Sabíais que en 2012 se estimó que el mercado de los lubricantes había incrementado un 10% anual? Sólo en España se facturaron 22,4 millones de € en este pasado año. Y es que este producto tiene mil y un usos: los ginecólogos los recomiendan en algunas patologías, las parejas los utilizan como juego sexual, es vital para las personas que no lubrican suficiente, etc. 

Pero... ¿cómo elegir el mejor entre tanta variedad en el mercado?

El cuerpo lubrica de manera natural pero por alguna disfunción o patología, por estrés, por falta de estimulación previa o por algún otro motivo, puede ser que falte algo de fluidez. La falta de lubricante (ya sea natural o artificial) podría provocar una rotura del condón - riesgo de transmisión de alguna enfermedad sexual o posible embarazo - o incluso ser doloroso para la pareja al tener la relación sexual. 

¿Todos los lubricantes son iguales?

Textura: los hay en gel, crema, líquidos o incluso supositorios para uso anal.

Composición: existen 3 tipos - base de aceite, base de agua o silicón.

Funcionalidad: los lubricantes no siempre están asociados con relaciones sexuales puesto que con la edad, muchas mujeres pierden la capacidad de auto-lubricarse y la sequedad les produce dolor e incomodidad. Destacar también que algunos medicamentos pueden provocar sequedad vaginal.

Se recomienda utilizar SIEMPRE lubricantes de base acuosa. No producen irritación en la piel ni aumentan el riesgo de rotura del condón que podría darse si es demasiado aceitoso ya que aumenta la fricción. Además, los oleosos pueden dañar el pH de la vagina femenina y dar lugar a posibles infecciones vaginales.

¿Y si quiero el lubricante para jugar? ;)

¡Totalmente válido e incluso más que divertido! Existen lubricantes con sabores y olores diversos. Existen incluso lubricantes que según los frotas, pueden producir frío o calor. Algunos de ellos sirven para hacer masajes por todo el cuerpo y no sólo para lo más íntimo. Sobre todo, remarcamos que deben ser de base acuosa si además de jugar, pretendes utilizarlo para mantener relaciones íntimas.

Si antes de comprar uno habíais pensado en que es mejor probarlo, existen centros de planificación familiar o incluso organizaciones tipo ONGs sobre sexualidad que dan saquitos de muestras gratuitas de lubricantes. Con ello intentan concienciarnos de lo positivo que es tener una cuidada salud sexual y así fomentar los buenos hábitos entre la población. 

En la actualidad, los lubricantes no se encuentran sólo en los sexshops. Los podéis encontrar también en el supermercado y en las farmacias. Puesto que siempre os contamos la importancia de contar con el consejo y opinión de un profesional de la salud, os invito a ir a la farmacia más cercana para preguntar a vuestro farmacéutic@ sobre qué tipo de lubricante de todos los que hay en el mercado os conviene más.